Hoy es el último lunes de un año que no ha sido malo, pero que hace desear que el siguiente sea mejor.
Este fin de fiesta no voy a poner propósitos, sino que directamente voy a desear, para que las fuerzas del universo confluyan para que se realicen... Y acto seguido me viene a la mente el "cuidado con lo que deseas" y es que a veces, para conseguir lo que queremos, lo que pasa por en medio no se puede considerar precisamente bueno.
Ni propósitos ni deseos. Así que que tal si empezamos a decir lo que no haremos el próximo año... "De este agua no beberé".
Si los propósitos no se cumplen, los deseos son peligros y siempre acabamos haciendo lo que no queremos...
Que este año 20-20 se cumpla la ley de Pareto y que de nuestro 100% de propósitos, se cumplan el 20%, el resto, ya veremos que hacemos con ellos.
Lo que si que podemos hacer es proponernos que nuestros deseos buenos y amables de salud, armonía y prosperidadpara los demás se cumplan y podamos beber por ellos aunque sea con agua. Nos leemos al año que viene... Bueno, si quieres. Mucho hygge, pero del bueno.