miércoles, 13 de diciembre de 2017

Sentido común y ética reflexiva.

Mientras iba de aquí para allá buscando todas esas cosas que se van acumulando en la lista de 'hay que comprar' o 'hay que buscar' escuchaba en la radio una propuesta del tipo 'feliz miércoles excepto a...' y un ejemplo bastante desafortunado que incluía insulto disimulado.

Una vlogger me sorprendió ayer con una confesión escondida en un vídeo de los ataques que hacen algunas personas sobre lo que se hace o deja de hacer en los vídeos. Algunos vídeos reciben comentarios tan emotivos que atacan la parte más sensible de los protagonistas, y cuando más al descubierto están las emociones se giran las cosas y 'que mal lo haces'... Viven de su imagen pero eso ¿autoriza a cualquiera a perder el sentido común?

Los paradigmas cambian y los padres deberemos incluir en nuestros, 'eso no se hace, eso no se dice, eso no se toca', no hagas comentarios que a tí no te gustaría que te hicieran, o se amable cuando quieras decir que algo que ha hecho ese vlogger al que sigues no te gusta. Hoy disponemos de vía directa con personas que nunca nos han sido presentadas-'desconocidos', y podemos opinar sobre su vida, familia, lo que comen o lo que hacen. Deberíamos poder opinar con educación y reflexionando si eso puede lastimarlos de alguna manera, porque eso es agresivo, y no podemos luchar contra agresiones de género, o bulling y creer que esto no es un tipo de agresión.

La ética debe ser asignatura obligada, y los contenidos actualizados anualmente o tendremos una generación de enmascarados sin juicio ni valores.

Hoy no voy a escuchar más y voy a dedicar mi rato hygge (chimenea, té, manta y calcetines mullidos a la lectura, que por naturaleza suele ser un acto reflexivo.







No hay comentarios:

Publicar un comentario