lunes, 28 de mayo de 2018

REFLEXIONES cuarto paso


 ¿Se puede reflexionar sobre todo?  La respuesta es que no. Hay decisiones, actuaciones que pueden y a veces  requieren reflexiones.

Pero no hay que confundir la reflexión con la preocupación. Mientras la primera puede ser clasificada, examinada, valorada e incluso rechazada o  procrastinada, una preocupación parte de un devenir sobre el que no  tenemos ninguna influencia.

Si tomo unas horas extras de trabajo para asegurarle los estudios a mis hijos, deberé reflexionar si es conveniente o es mejor pasar ese tiempo con ellos, si el tiempo extra no me agotará siendo de peor calidad el tiempo dedicado a la familia, o si por el contrario será positivo poder relacionarme en  otros ámbitos profesionales.

Pero si empiezo a darle vueltas a qué estudiará estoy preocupándome, porque no puedo actuar ni sobre sus deseos, ni sobre el devenir.

Así que si te viene un pensamiento del segundo ámbito actúa racionalizándolo. 
*no puedo saber que pasará en el futuro, los anhelos de los demás están fuera de mi alcance, no tiene sentido pasar tiempo en esta zona de preocupacion.*

Y te preparas un té en tu taza favorita y te sientas en ese espacio que te hace sentir especialmente bien y te bebes las preocupaciones a sorbitos mientras te preparas para la quinta parte. Hyggelig reflexiones. 

No hay comentarios:

Publicar un comentario