domingo, 25 de junio de 2017

Estuvimos allí: Y dijo Pelayo 'Sol is'

Hoy nos vamos al otro extremo de España para vivir una experiencia hygge con cierto toque mágco que me sirvió para conocer más sobre mi apellido.

¿Por qué esta historia?, porque el cerebro hace asociaciones extrañas. La tele está puesta y ha salido Café Quijano. Eran fiestas y tocaban en el estadio de fútbol y como no podíamos dormir porque no nos llegaba para el aire acondicionado y dormíamos con la ventana abierta - y lo oíamos perfectamente-decidimos salir a las 4  de la mañana rumbo a Asturias. Elegimos un castillo medieval en Salas y cuando llegamos (14 horas más tarde) el chico de recepción miró mi carnet y me dijo, que coincidencias de la vida, se llamaba como yo pero con el orden de los nombres invertidos y compartíamos el mismo apellido. Parece que el apellido es bastante común  allí. Pero además había nacido el mismo día que yo, aunque por fortuna para él, más de diez años antes-por lo que calculé,

Solo pasamos una noche, luego fuimos a Covadonga donde aprendí que no puedo caminar por encima del agua pero hay gente que tiene mucha fe y puede. Que no es buena idea ir con poca ropa en la maleta, que la sidra se toma a 'culetes' y que por muy lejos que te vayas siempre encuentras a alguien conocido. 

¿Y la historia de mi apellido? Me pongo en modo juglar.

Los moriscos atacaban los valles del rey Pelayo y este se dirigió a sus caballeros y señalando al cielo les dijo 'Sol is' Que en latín significaba que todavía quedaba suficiente luz para luchar. Sus aguerridos caballeros lucharon bravamente y tiraron al enemigo. Aquel lugar fue nombrado Señorío de Solís y entregado a sus defensores. Pero tan inquietos eran que fueron a Mallorca, Andalucía y Zaragoza. Yo soy de la andaluza, de la de Isabel de Solís, reina mora de la Alhambra o de los colonizadores del nuevo mundo que salieron de las costas de huelva. Hyggelig noche, parece que hoy refresca.

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