martes, 3 de abril de 2018

Cuando el espacio es grande y las perspectivas pequeñas.

Cuando las puertas son estrechas permiten ver luz, pero no sabemos cómo de amplio serán las oportunidades que habrán al otro lado. 

En el caso de la foto era un paso clausurado de la entrada original del Castillo de Sigüenza que da paso al impresionante patio de armas, una defensa en sí misma al permitir solo el paso de un hombre a la vez. 

Tal vez debemos utilizar el pensamiento lateral y ver que cuando las puertas son estrechas no es porque nos quieran ocultar lo que hay al otro lado, sino que lo que se trata es de entrar sin empujones, descubriendo lo que hay de forma pausada y profunda.

Oímos mucho la consigna salir fuera del área de confort, aunque los problemas que esto está generando, sobre todo entre los milenials, lleva a la sociedad a reflexionar si este salto  es conveniente en todo momento y para todo tipo de persona. Por un lado salir lleva al caos y por otro lado aparecen aquellas corrientes que te incitan al orden, y a cada cosa en su sitio -método Marie Kondo por ejemplo. 

Por otro lado están los que para facilitarte el orden te invitan al reduccionismo drástico, tanto en tu entorno como en tu alimentación. El Minimalismo es otra fuente de contenido.
s que compite con las vloggers atacadas por la compulsividad adquisitiva. 

Cuando miro la foto veo el paso del uno al todo y cierto vértigo te empuja fuera de la zona oscura hacia la luz. En la zona oscura habita el orden, las rutinas, las necesidades mínimas cubiertas. En la luz tal vez hay lo mismo pero hay que volver a descubrir, asimilar y codificar. Ahora que por fin he conseguido cierto orden ha llegado el momento de poner una cucharadita de caos. 

Pero de momento le ponemos la cuchara al café y mucho hygge. Id preparando el de primavera que la mantita ya va fuera.





No hay comentarios:

Publicar un comentario